ANGIOLOGÍA E HIPERTENSIÓN ARTERIAL
La angiología (del griego angeios, vaso, y logos, discurso) tiene por objeto el estudio del sistema vascular periférico.La misión fundamental del sistema vascular es cumplir la función circulatoria de suministro de oxígeno y aporte energético a los tejidos, eliminar los productos de excreción, distribuir los elementos secretados por las glándulas endocrinas y regular la temperatura corporal. Para ello dispone de un sistema impulsor formado por el corazón y las arterias, de un sistema recolector y de retorno integrado por el sistema venoso, y de una extensa red capilar, capaz de sufrir modificaciones constantemente en su nivel funcional para conseguir el intercambio en los diversos órganos y tejidos.Funcionalmente el sistema vascular se divide en cuatro sectores:1. Sector de reserva de presión. Constituido por la aorta y los vasos de gran y mediano calibre, con una pared rica en fibras musculares, capaces de retener la energía transmitida por el latido cardíaco y conseguir una mejor distribución del flujo pulsátil para que llegue de forma uniforme a los tejidos.2. Sector de resistencia. Compuesto por las arterias de pequeño calibre, arteriolas y capilares arteriovenosos. La resistencia periférica se halla regulada básicamente por estos últimos, capaces de modificar el porcentaje de su rica red que se halla en funcionamiento según las necesidades de irrigación del órgano o tejido en cada momento. Junto con el sector de presión contiene aproximadamente el 20% del volumen sanguíneo.3. Sector de intercambio. Compuesto por el lecho capilar, a través del cual se produce el intercambio celular. Contiene el 5% del volumen sanguíneo.4. Sector de reserva de volumen. Formado por el sistema venoso, auténtico sistema de capacitancia que almacena el 75% del volumen circulante.La regulación del sistema vascular es ejercida por el control nervioso (simpático) sobre las arteriolas. Con todo, las pequeñas arteriolas responden principalmente a los cambios bioquímicos locales, en especial al óxido nítrico liberado en respuesta a la agresión endotelial causada por los cambios de flujo sanguíneo. Otros factores, como las prostaciclinas, actúan también sobre las arteriolas, aunque de forma más retardada.
Autores:
J. Jurado Grau y C. Miquel Abbad.