MAL DE ALTURA
El esquiador, montañero, alpinista o simple aficionado al deporte, que sin preparación alguna parte a la descubierta de un parque natural de alta montaña, puede tener que enfrentarse a serios problemas relacionados con el "mal de altura".
Desde aproximadamente cien años se sabe que la disminución de la presión atmosférica actúa sobre los seres vivos, disminuyendo la tensión de oxígeno en el aire que se respira.
Esta premisa es la base y fundamento del posible desencadenamiento de alteraciones que pueden dar lugar al síndrome de "mal de altura".
¿Qué factores debemos valorar en la atmósfera?