TRATAMIENTO
El tratamiento puede dividirse en cinco apartados que incluyen: a) medidas generales como la abstinencia alcohólica, la pérdida de peso, el tratamiento de la obstrucción nasal y evitar dormir en decúbito supino; b) la administración de fármacos como la protriptilina que, al suprimir la fase REM, evita las apneas de esta fase del sueño y, además, activa selectivamente los músculos de la vía aérea superior, o la progesterona; c) el empleo de presión positiva continua de la vía aérea superior por vía nasal (CPAP) durante la noche, que es el tratamiento de elección en la mayoría de casos; d) la cirugía, y e) otras alternativas.
El objetivo general del tratamiento es no sólo mejorar la sintomatología sino también conseguir todas las alteraciones fisiopatológicas. Es decir, siempre debe comprobarse mediante un estudio nocturno la desaparición de las apneas con el tratamiento. Los pacientes sintomáticos con un índice de apnea por hora superior a 20 siempre deben tratarse. En la imagen superior se muestra la propuesta del esquema terapéutico. En la gran mayoría de los casos es prioritario iniciar el tratamiento con CPAP que, al actuar a modo de válvula neumática, impide el colapso de la vía aérea superior. La CPAP no es un tratamiento curativo, lo cual implica que su aplicación debe ser continuada. La mayoría de los pacientes la tolera perfectamente, con una mejoría espectacular de su sintomatología clínica.
La cirugía está indicada cuando existen alteraciones anatómicas específicas en la vía aérea superior, como obstrucción anatómica de la nariz, amígdalas gigantes o anomalías óseas manifiestas (retrognatia). Para los pacientes que no presentan alteraciones específicas de la vía aérea superior existen diversas opciones quirúrgicas, cuya eficacia no ha sido plenamente demostrada, siendo la más utilizada la uvulopalatofaringoplastia (UPFP), que pretende eliminar los diversos factores anatómicos que favorecen el SAOS. En un futuro próximo, cabe esperar resultados espectaculares mediante el empleo de técnicas quirúrgicas de avance mandibular. En los casos de apneas obstructivas únicamente durante la fase REM, pueden prescribirse antidepresivos. Algunos casos de SAOS asociados al síndrome de obesidadhipoventilación responden al tratamiento con progesterona. Otras modalidades de tratamiento, como la oxigenoterapia, la teofilina, la almitrina y las técnicas de ortodoncia sólo tienen un papel coadyuvante y, en general, son poco útiles.