SÍNTOMAS DE LA TRIQUINOSIS
En el hombre, los efectos de esta parasitosis son muy variables en cuanto a sintomatología y también respecto a la gravedad de la propia enfermedad. A las veinticuatro, cuarenta y ocho horas de haber ingerido la carne contaminada puede comenzar un cuadro intestinal, con dolores difusos de vientre, náuseas, vómitos y diarrea, que siempre se acompaña de fiebre alta, que alcanza rápidamente los 40 grados centígrados de temperatura y se mantiene durante varias semanas.
La diarrea, con frecuencia aguda, provoca heces líquidas continuas, como un cuadro de cólera, y llega a poner en peligro la vida del enfermo por causa de simple deshidratación.
Alrededor de una semana después de la infección las Iarvas pueden haber pasado a fijarse en los músculos estriados, causando grandes dolores o "mialgias", que se acompañan de debilidad profunda, mal estar generalizado y dolores de cabeza, así como de deglución. También pueden producir reacciones alérgicas capaces de causar la muerte del paciente.