AHOGAMIENTO POR AGUA SALADA
Si recordamos que el agua dulce es hipotónica, es decir, con menor actividad osmótica que la barrera alveolo-capilar, el agua salada tiene, por el contrario, una actividad osmótica mayor que el plasma sanguíneo, con lo cual su presencia en el árbol broncopulmonar atrae los líquidos sanguíneos hacia la luz bronquial, dando lugar a alteraciones persistentes del revestimiento epitelial interno de los bronquios.
Su presencia en ellos motiva una inflamación duradera que dificulta en grado sumo los intercambios de oxígeno a nivel alvéolo-capilar. No existe gran cantidad de agua salada a nivel bronquial en el asfixiado, porque su irritación da lugar a un broncoespasmo, es decir, a un cierre de los bronquios.
Su gran capacidad atractiva "chupa" el plasma de los capilares bronquiales, dando lugar a una deplección (salida) de proteínas.
Como resultado de estos efectos a nivel broncopulmonar, vamos a tener en la víctima de asfixia por agua salada:
a) Una falta de oxígeno agua (hipoxia).
b) Acidosis respiratoria y metabólica.
c) Edema agudo pulmonar (es decir encharcamiento de los pulmones por salida de líquido plasmático a los alvéolos pulmonares, sustituyendo el oxígeno normal que los ocupa por líquido plasmático).
d) Hipovolemia, es decir, falta de volumen líquido en el sistema circulatorio.