VACUNACIONES OBLIGATORIAS
En España, las competencias en materia de sanidad están referidas a las distintas comunidades autónomas, por lo que ellas mismas gestionan el Programa de Vacunaciones Infantiles, y el Ministerio de Sanidad ejerce la coordinación y evaluación general del mismo. Las vacunas infantiles incluidas en el calendario vacunal se administran de manera gratuita.
Las vacunas protegen a los niños de la tosferina, la difteria, la polio, el sarmapión y el tétanos. Las vacunas que inmunizan contra la tosferina, la difteria y el tétanos suelen combinarse en una vacuna "triple" que se pone en una inyección. La vacuna contra la polio se administra por vía oral, normalmente junto con la triple, DTP. El bebé debe recibir su primera dosis de estas vacunas hacia los tres meses, la segunda a los seis meses y la tercera antes del año de edad. El calendario de vacunaciones puede variar ligeramente, pero más o menos seguirá los siguientes pasos. Cuando el bebé tiene entre dos y tres meses de edad es conveniente vacunarle de la DTP, es decir, una inmunización triple hacia la difteria, el tétanos y la pertussis o tosferina, además de la poliomielitis.
Estas dos vacunas, se repitirán cuando el niño tenga entre cinco y seis meses. Antes de que el niño cumpla el año, entre los nueve y once meses, sólo se le vacunará de DTP. La vacuna del sarampión se realizará en su segundo año de vida.
En el colegio, de forma gratuita, se administrará al niño entre cuatro y seis años la DT (difteria y tétanos) y un "recuerdo" de la poliomielitis. Entre los diez y los catorce años se administrará la vacuna BCG (Bacille Calmette-Guèrin) de la tuberculosis. Además, a esta edad también, todas la niñas deben ser vacunadas contra la rubéola, aunque ya hayan pasado la enfermedad. Justo al finalizar la etapa escolar, entre los 15 y 18 años, se le vacunará al adolescente de una dosis de recuerdo del tétanos y de la poliomielitis.
La importancia de la vacuna frente al tétanos se debe a que se trata de una enfermedad neurológica muy poco frecuente pero de consecuencias muy graves, producida por la toxina del bacilo tetánico. Se puede encontrar en la tierra, heces o metales oxidados y, por ello, sería especialmente importante su protección en personas de riesgo, como por ejemplo, los niños. La vacunación consiste en tres dosis subcutáneas o intramusculares de toxoide antitetánico purificado. La protección dura unos diez años, momento en el cual habrá que administrar una nueva dosis de recuerdo.
La vacuna de la tuberculosis consiste en una forma modificada de las bacterias tuberculosas y tiene el mismo efecto que la infección primaria leve, y proporciona algo de inmunidad.
