ERUPCIONES PURPÚRICAS
Diversos fármacos pueden producir erupciones purpúricas, ya sea induciendo una trombocitopenia o bien desencadenando una vasculitis necrosante, en cuyo caso la púrpura será palpable pudiéndose encontrar también ampollas hemorrágicas, necrosis y nódulos. Puede afectar otros órganos, como riñón, cerebro, hígado y articulaciones.
Un cuadro característico es la púrpura eccematiforme de Doukas y Kapetanakis inducida por carbronal y la necrosis cutánea por warfarina, que afecta sobre todo a mujeres, a los 3-10 días de comenzar un tratamiento con derivados de warfarina, con la aparición de placas eritematosas, purpúricas e induradas que desde este estadio pueden evolucionar a la curación espontánea o, con mayor frecuencia, a la formación de ampollas hemorrágicas, con necrosis final y formación de escaras que tardan en curar.