ERUPCIONES EXANTEMÁTICAS
Las más comunes, pueden ser de dos tipos: precoces, a los 2-3 días de recibir el medicamento, y tardías, que aparecen después de más de una semana (eritema del 9.o día). Su aspecto es morbiliforme o escarlatiniforme y tiene gran tendencia a la generalización y distribución simétrica, acompañándose con frecuencia de febrícula. Resulta difícil diferenciarlas de los exantemas víricos, principalmente en la infancia. Los fármacos responsables de este tipo de erupciones son muchos de los utilizados en la práctica diaria (penicilina y derivados, sulfamidas, antiinflamatorios no esteroides –AINE–, barbitúricos, hidantoínas, fenotiazinas, benzodiazepinas, eritromicina, tetraciclinas, isoniazida, carbamazepina, alopurinol, etc.).