HÁBITOS ALIMENTARIOS
Cuando hablamos de hábitos alimentarios nos referimos a distintos aspectos de la alimentación. Algunos se relacionan con el ritmo de las comidas: hay personas que sólo hacen una comida "de verdad", al mediodía o por la noche y algunos ligeros tentempiés; otras, en cambio, necesitan comer por la mañana, al mediodía y por la noche. Las familias de origen asiático o africano suelen comer por la mañana y por la noche y no se alimentan durante el día. Al contrario las viejas familias campesinas comen cuatro o cinco veces al día, al igual que los niños que a menudo toman una merienda abundante. Otros hábitos se relacionan con la elección de los alimentos. Una familia suele consumir los mismos alimentos de un año a otro, con variaciones estacionales. Algunas se han mantenido fieles al pan y a la sopa, otras prefieren como plato básico el arroz o las patatas. En ciertos hogares se toma mucha leche y productos lácteos, mientras que en otros practicamente se prescinde de estos alimentos. También el consumo de carne, pescado o equivalentes depende de las costumbres: imprescindible para algunos e impensable para otros. Asimismo la cocción está relacionada con los hábitos: mantequilla o aceite, comidas rápidas o platos cocidos a fuego lento, preparaciones modernas o tradicionales son algunas de las opciones posibles.Por último, la duración de la comida varía mucho de una familia a otra. Algunos prefieren las comidas en común, donde cada cual puede contar cómo le ha ido el día y participar en la vida colectiva; otros se sientan a la misma mesa, pero con la mirada pegada al televisor.