DIETA EN LA ENFERMEDAD GASTROINTESTINAL
La dieta en las enfermedades gastrointestinales va ligada a las alteraciones esofágicas, gástricas, del intestino delgado y grueso o de los anejos: hígado y páncreas. Existen pruebas evidentes de la eficacia de las dietas en el tratamiento de los síndromes de malabsorción de los nutrientes, las causas suelen ser dos: intolerancia a la lactosa, en este caso se eliminará la leche de la dieta del enfermo, o la enfermedad celíaca, enfermedad en la que es preciso imponer una dieta sin gluten, es decir, excluyendo todos los cereales excepto el maíz y el arroz.
No está clara la importancia de una terapeútica dietética en el tratamiento de ciertas enfermedades gastrointestinales, como la úlcera gástrica y la colitis ulcerosa.
El tratamiento médico de la úlcera péptica se basa en la neutralización del ácido clorhídrico del estómago y la protección de la zona ulcerada. Durante muchos años se ha tratado con una dieta adecuada, junto con la administración de antiácidos no absorbibles destinados a neutralizar la elevada producción gástrica característica de esta enfermedad. El tratamiento, en general, consiste en un régimen liberal con varias comidas al día y con los alimentos que el paciente tolere.