CONSEJOS GENERALES; RESPECTO AL USO DE MEDICINAS Y FÁRMACOS DIVERSOS
- La peligrosidad intrínseca de una sustancia es función de la dosis, aunque en ciertos casos pequeñísimas cantidades puedan resultar nocivas e incluso letales para ciertos individuos.
- Esas dosis pueden ser función del peso vivo del organismo que las ingiere; por lo tanto, los niños, con menor peso que los adultos, resultan más sensibles que ellos a igualdad de cantidad absoluta.
- Los medicamentos deben ser guardados en armarios especiales, bajo llave, y solamente deben ser almacenados aquellos estrictamente necesarios y en cantidades reducidas.
- Nunca deben conservarse restos de medicinas ya empleadas y que cumplieron su cometido, y menos aún fuera de sus envases originales, sin prospectos indicativos o con fecha de caducidad "pasada".
- Las personas mayores, sometidas a tratamientos continuos, no llevarán en sus bolsos, especialmente las señoras, pastilleros conteniendo un "repertorio" de sus medicinas, que puedan ser inadvertidamente atrapadas por niños de corta edad.
- El botiquín de emergencia del automóvil, o el de "acampada", nunca deben situarse en lugares "a mano" de los niños y estarán custodiados por las personas más responsables del grupo.
- Siempre deben conservarse las etiquetas y folletos indicativos de la composición cualitativa y cuantitativa (tipo de sustancia y cantidad) de los medicamentos que se guardan o transportan para su empleo en un momento dado.
